Ankara se sitúa a menos de 400 kilómetros de Estambul y su carácter es cosmopolita, no diferenciándose del resto de otras grandes ciudades. Su gran característica es que podrás tener cerca multitud de museos, en los que admirar el arte y las propuestas pictóricas más arriesgadas.
Una de las primeras visitas que podrás realizar será la del Museo de las civilizaciones anatolias, en donde se mostrarán todos los documentos históricos y fotografías más significativas de todos estos tiempos. El Museo etnográfico, también será otra de las paradas más significativas, pudiendo contemplar desde las prendas clásicas hasta las armas y todo tipo de bordados y arte casero tradicional.
También te encontrarás con un par de clubs nocturnos, tales como Kösk, que te encantarán para distraerte y acercarte a los restaurantes más cercanos, donde podrás tomar desde "Salatalar" o ensaladas típicas, hasta Mezeler, entremeses o el conocido kebak, carne de pollo o ternera servido en pan de pita.
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